Hay algo especial y exótico en el sutil maridaje del chocolate y el cardamomo y una textura novedosa en este pastel que os propongo.
Os recomiendo que la probéis.
Realmente el chocolate es una de mis debilidades, todos los días tengo que tomarme al menos una onza y creedme me cuesta mucho que sea sólo una. !Dichosa dieta! No se por qué motivo el otro día busqué una receta especial de chocolate, seguramente tendría mono chocolatil y alguna comida familiar. Este postre lo saqué de un libro muy interesante titulado “Chocolate, recetas deliciosas para los amantes del chocolate” Autor: Maxine Clark, Ediciones Ceac.
Para mi, que soy muy chocolatera el pastel me resultó un poco empalagoso así que os propongo otras opciónes a esta tarta, hacer unos bombones o unas trufas.
Ingredientes:
Para la base:
150 gr de galletas.
60 gr de mantequilla sin sal a temperatura ambiente.
60 gr de azúcar moreno.
Para el pastel:
600 ml de nata para montar.
4-6 vainas de cardamomo verde, un poco golpeadas para abrirlas.El cardamomo lo podeis comprar en las herboristeria o donde soláis comprar las especias.
750 gr de chocolate negro al 60-70 % de cacao.
55 gr de mantequilla sin sal.
4 cucharadas de licor de chocolate (yo le puse ron)
Para decorar:
3 vainas de cardamomo.
50 gr de azúcar en polvo.
50 gr de cacao en polvo sin azúcar.
Modo de hacerlo:
1º Triturar las galletas con la mantequilla y el azúcar moreno. Poner esta mezcla sobre la base de un molde desmontable.
2º Hervir durante 10 min la nata con las semillas de cardamomo, cuando haya transcurrido ese tiempo...
3º sacar las semillas y añadir a la nata caliente los demás ingredientes, mantener a fuego lento hasta que todo esté bien derretido y mezclado.
4ºPoner esta mezcla sobre la base de galletas y meter en la nevera hasta que solidifique (6 horas como mínimo).
5º Por último y para decorar cogemos un mortero o un molinillo de café molemos el azúcar glass con el cacao en polvo y las semillas de la vaina de cardamomo obtendremos así un polvillo aromatizado delicioso. Con esta mezcla espolvoreamos la tarta.